Belaya bratva - Brook Wilder

 

Conquered Bride

Fui tomada cautiva, y forzada a casarme con el monstruo de mis pesadillas.
Borró mi nombre cuando forzó su anillo en mi renuente dedo.
Destruyó mi vida cuando me obligó a arrodillarme a sus pies.
Gavril Kirilenko es un asesino que se casó conmigo contra mi voluntad.
Un hombre que no acepta un no por respuesta.
Lo dejó claro desde el momento en que sus ásperas manos me arrancaron el vestido de novia:
Puedo someterme a él como su esposa.
O puedo elegir un destino peor que la muerte.
Nuestro matrimonio se construyó sobre la mentira.
Y revelar la verdad no me hará libre…
Porque hacerlo significa pagar el precio final.
Él conquistará mi cuerpo.
Y yo haré el papel de su obediente esposa.
Pero nunca le daré mi corazón.

Broken Bride

Gavril Kirilenko destruyó mi vida cuando me obligó a ser su novia cautiva.
Con una sola mirada, me tomó.
En su lecho de depravación, me doblegó.
Mi cuerpo era suyo.
Para hacer con él lo que quisiera.
Donde él quisiera. Cuando él quisiera.
En el altar, prometió que me amaría y me protegería.
En privado, me hizo hacer cosas innombrables.
Noche tras noche, entregué mi cuerpo a sus oscuros deseos.
Mi sufrimiento se convirtió en su placer, mi dolor en su alegría.
Se apoderó de mi cuerpo y destrozó mi corazón.
Pero nada podía prepararme para lo que vino después:
Su heredero creciendo en mi vientre.

Sinful Bride

A la fuerza colocó su anillo en mi dedo, y puso a su bebé en mi vientre.
Nuestro matrimonio puede ser falso.
Pero nuestro bebé es real.
Gavril Kirilenko es un monstruo que robó mi inocencia y me doblegó en su cama.
Me hizo su princesa de la mafia.
Suya para usar y devastar.
Hasta que mi garganta estuvo en carne viva de gritar su nombre.
Me reclamó incluso antes de llegar a nuestro altar.
Me desnudó y me hizo hacer cosas indescriptibles.
He tratado de desafiarlo.
He intentado huir de él.
Pero una y otra vez, me trajo de vuelta.
Una y otra vez, me hizo someterme a su toque.
Rogarle por más.
Se supone que debo odiarlo.
Pero no puedo hartarme de él.
Y ahora... él es mi única esperanza de supervivencia.